Soledad

“Soledad no es solo un testimonio íntimo, complejo, contradictorio, herido y luminoso, sino una historia profundamente transformadora. La autora nos comparte luces y sombras, certezas y preguntas, dolor y redención. Y al hacerlo, nos da permiso a todos para abrazar nuestras propias grietas”.

Extracto del prólogo, José Ignacio Valenzuela, escritor.

Esta novela tiene la gracia de atrapar desde el primer párrafo, como sucede con la buena literatura. En Soledad las emociones se adueñan de los personajes y el lector sentirá que realmente vive lo que está leyendo. Hay tensión, intensidad y personificación, características que poseen las novelas bien escritas. Pero, por encima de todo eso, debo resaltar lo entretenida que es.

Ana María Güiraldes, escritora.

Cuando uno lee textos de Ximena Güiraldes, su lenguaje, tramas, la fluidez con que narra lleva a preguntarse sobre el asalto súbito y por sorpresa con que nos cae encima una narradora que sabe lo que hace al escribir cada frase. En Soledad, Ximena Güiraldes muestra un texto escrito con la facilidad y fluidez de un pez en el agua y, a lo largo de casi 150 páginas no da tregua, no suelta a su presa: el lector, quien no puede sino querer seguir adelante en su lectura, al que no le toca sino tener que reflexionar, sentir, vivir y explorar un trayecto en que amor, erotismo, mundo social, expectativas y realidades se entrelazan y chocan implacables, como en la vida misma.

Javier Edwards Renard, escritor y crítico literario.